La comunidad de Fasta en Costa Rica se unió a la alegría nacional al conmemorar ayer, 15 de septiembre, los 204 años de la independencia de su país. El festejo de la comunidad se suma a las celebraciones cívicas que recuerdan un hito fundamental en la historia de la nación centroamericana.

Historia de una independencia pacífica

A diferencia de muchos países de América Latina que consiguieron su independencia a través de cruentas batallas, Costa Rica se liberó de forma pacífica. La noticia de la independencia de España llegó a San José el 13 de octubre de 1821, un mes después de que el Acta de Independencia de la Capitanía General de Guatemala se firmara el 15 de septiembre.

Los costarricenses recibieron la noticia sin derramamiento de sangre. La principal razón de esta particularidad histórica fue la lejanía del país con los centros de poder virreinales, lo que la mantuvo relativamente aislada y sin una fuerte presencia militar española. Este hecho forjó en el país una identidad basada en la paz y la democracia, valores que se mantienen hasta hoy.

La celebración de Fasta se enmarca en este espíritu cívico y cristiano. La comunidad de Costa Rica se une al sentimiento patrio, reafirmando el compromiso del Movimiento con los valores fundacionales de la nación, bajo el ideal de la Civilización del Amor.