El Director de la Maestría en Tecnologías Digitales para la Innovación Educativa de la Facultad de Ciencias de la Educación, doctor Gustavo de Elorza Feldborg, analizó en una entrevista con Infobrisas diversos temas vinculados con el uso de las TIC en las aulas y las necesidades de capacitación permanente por parte de los educadores.
El profesor Gustavo De Elorza Feldborg cuestionó la reciente prohibición del uso de celulares en las escuelas primarias bonaerenses, advirtiendo que regular y capacitar a los docentes es el camino para una educación digital responsable, y no la censura tecnológica.
La reciente decisión de la Legislatura de la provincia de Buenos Aires de prohibir los celulares en la primaria abrió un intenso debate en la comunidad educativa. En diálogo con Radio Brisas, el profesor e investigador en Neuro-Tecno-Educación Gustavo De Elorza Feldborg remarcó que la medida refleja una falta de estrategias de fondo:
“No tenemos que prohibir. Significa que no tenemos respuesta como educadores para convivir con esta nueva realidad”, afirmó.
De Elorza sostuvo que en los primeros años es clave alfabetizar con libros y cuadernos, pero sin dar la espalda a la tecnología.
El especialista advirtió que los docentes no fueron capacitados en el uso pedagógico de pantallas y que la falta de formación genera decisiones apresuradas como la actual prohibición.
Ciudadanía digital y rol de la escuela
- Aprender a diferenciar páginas confiables.
- Prevenir riesgos de grooming y depredadores en línea.
- Formar ciudadanos digitales responsables.
“Estamos dejando huérfanos de protección a los estudiantes cuando los docentes podrían ser los referentes”, subrayó.
Capacitación, la salida del laberinto
Elorza insistió en que la solución no está en prohibir, sino en invertir en formación docente para integrar los celulares a la enseñanza.
“Si hoy prohibimos los teléfonos móviles, mañana vamos a prohibir la inteligencia artificial”, ejemplificó.
En su visión, la verdadera salida del “laberinto educativo” es dar a los maestros herramientas para enseñar el uso responsable de la tecnología y convertirla en un recurso pedagógico clave para el siglo XXI.
Fuente: Infobrisas
Entiendo la postura del Dr. De Elorza, pero no coincido. Creo que acá se aplica bien un principio fundamental: la realidad está por encima de la idea. Podemos aspirar a integrar las tecnologías en las aulas, pero la realidad es que hoy los docentes no tienen la formación suficiente y los chicos no cuentan con la madurez para manejar un celular de manera responsable.
Numerosos médicos, psicólogos y neurocientíficos son claros respecto a los riesgos del uso temprano de pantallas: problemas de atención, sueño, socialización y hasta adicciones. Pretender que con el tiempo la capacitación docente solucione esto es desconocer que el daño puede producirse ahora.
Es como un cuchillo: es útil, sí, pero NO se lo damos a un bebé hasta que esté en condiciones de usarlo. Lo mismo pasa con los celulares. No es censura, es prudencia.
La escuela puede y debe enseñar ciudadanía digital, pero eso no depende solamente del celular. Se puede formar a los chicos en pensamiento crítico y seguridad digital con otros dispositivos más controlados, y mientras tanto avanzar en la capacitación docente.
Por eso, creo que prohibir el celular en la primaria no es retroceder, sino proteger. Integrar tecnología llegará en su momento, pero hoy no están dadas las condiciones.