Un hijo de Kinshasa es sacerdote de Fasta

Ya pasaron más de 11 años desde que el papa Francisco le pidiera al Padre Fundador, durante su primer encuentro «No te olvides de África», frase que permanentemente vuelve a nuestros corazones. Mensaje del Papa Francisco.

Este sábado 10 de agosto el diácono  Reneidi Kayembe Kayembe fue ordenado sacerdote en una emotiva ceremonia presidida por Monseñor Alejandro Giorgi obispo auxiliar de Buenos Aires donde también fue ordenado diácono el seminarista Gabriel Filipe.

La ceremonia estuvo cargada de emotividad desde el comienzo misma de la ceremonia. El coro especialmente preparado para este día le dio un marco especial a este día tan importante para la Ciudad Miliciana.

Mensaje del Papa

El Santo Padre Francisco envío una bendición apostólica donde los «alienta a perseverar con renovado entusiasmo en su generosa entrega a Dios y a la Iglesia siendo siempre testigos del mensaje salvador de Jesucristo», mensaje que fue leído por el padre Andrés Quiroga.

Cálida homilía de monseñor Georgi

En el momento de la homilía monseñor Georgi dijo que «hoy queridos Reneidi y Gabriel, como a Simón Pedro, Jesús lo llama aparte y les hace esa pregunta que desborda de su corazón, corazón sagrado. Esa pregunta que nos sumerge en el abismo y nos da vértigo, que termina resultando tan difícil de responder: «¿ Me amas?» .

Más adelante destacó que «ustedes dos, Reneidi y Gabriel, son tocados, como le pasó a Jeremías por la mano extendida del Señor que pone en sus labios la Palabra, con mayúsculas; la Palabra de Dios».

Padre Reneidi: «Láncense y vamos juntos a la aventura»

Gracias, gracias. Cuando entrábamos, cuando dábamos la comunión veía esta basílica repleta de gente y me preguntaba ¿A quién vinieron a ver? A este gordito no. Vinieron a ver a Jesucristo. Así que a Él agradezco de todo corazón y en Él a cada uno de ustedes que me marcaron este camino, este proceso. Acada uno de ustedes que me escuchó cuando estaba medio loquito. A cada uno de ustedes que me dio consejos, que me abrazó, que me sostuvo. A  cada uno de ustedes que siempre está.

Hoy de manera particular recuerdo a mis dos padres que hubiesen querido estar acá. Pero sé que están aquí. Así que allá (mirando al cielo) Gracias.

Es largo el camino difícil de andar. Esto depende también de ustedes. Así que aquí estoy: su amigo, su hijo, su compañero su «pana». En fin: sacerdote de Jesucristo.

Esto quiere ser también un mensaje a los jóvenes: déjense seducir por Jesucristo que no quieta nada, lo da todo, lo sana todo, lo purifica todo. Láncense y vamos junto a la aventura.

Agradecimientos de Gabriel Filipe 

El nuevo diácono Gabriel Filipe dijo que «mi paso por el colegio de Fasta, los amigos, compañeros, maestros, muchos rostros que me marcaron, el Ruca. En todos esos lugares Dios me fue diciendo de a poco cuánto me amaba», de lo que se informa por separado.