Un acontecimiento sin precedentes se está desarrollando en la localidad de Mallín, Córdoba, donde los Presidentes de las jurisdicciones de Fasta Argentina participan del primer Retiro Espiritual de Presidentes Jurisdiccionales. Esta iniciativa histórica, organizada por la Dirección del Movimiento Argentina y liderada por los milicianos Pablo Olivero y Victoria García, marca el acompañamiento y la formación de los líderes de cada jurisdicción.

La relevancia de este retiro radica en que es la primera vez que se organiza una actividad de este tipo exclusivamente para quienes tienen la responsabilidad de guiar las comunidades de Fasta en sus respectivas jurisdicciones a lo largo y ancho de Argentina. Es un espacio diseñado para la reflexión profunda, el encuentro personal con Dios y el fortalecimiento de los lazos fraternos entre quienes comparten una misma misión.

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Los Beneficios del Retiro Espiritual para Fasta

La participación en un retiro espiritual ofrece múltiples beneficios, especialmente para quienes ejercen roles de liderazgo en una institución como Fasta:

• Renovación personal y espiritual: Permite a los presidentes detenerse en medio de la vorágine de las responsabilidades, para reconectar con lo esencial de su vocación y con la fuente de su servicio, el amor a Cristo y a la Obra.
• Fortalecimiento del carisma: A través de la oración y la meditación, se profundiza en el carisma fundacional de Fasta, clarificando la visión y los principios que guían su acción en cada jurisdicción.
• Discernimiento y dirección: Un espacio de silencio y reflexión ayuda a discernir los desafíos y las oportunidades, permitiendo a los líderes tomar decisiones más inspiradas y alineadas con el plan de Dios para Fasta.
• Unidad y comunión fraterna: El compartir este tiempo de gracia forja lazos de amistad y comprensión mutua entre los presidentes, fundamental para la coordinación y el trabajo conjunto en la construcción de la Ciudad Miliciana en todo el país.

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Traducción del Retiro en las Jurisdicciones

Los frutos de este retiro espiritual no se quedarán en Mallín. Los presidentes jurisdiccionales están llamados a traducir la experiencia vivida en acciones concretas para sus comunidades:

• Liderazgo renovado: Volverán a sus jurisdicciones con una fuerza espiritual renovada, un entusiasmo contagioso y una visión más clara para sus planes de acción.
• Impulso evangelizador: La inspiración recibida los animará a impulsar con mayor vigor la evangelización de la cultura, la juventud y la familia, pilares de la misión de Fasta.
• Mayor cohesión comunitaria: La vivencia de la unidad y la fraternidad en el retiro se reflejará en el fomento de una comunión más profunda en sus propias comunidades, promoviendo el diálogo y la corresponsabilidad.
• Proyección de la Obra: Al estar más conectados con el carisma y entre ellos, podrán impulsar proyectos y actividades que beneficien a toda la Obra de Fasta en Argentina, con una mirada más amplia y unificada.

Este histórico retiro es una clara señal del compromiso de Fasta Argentina con la formación integral de sus líderes, reconociendo que el crecimiento espiritual es la base para un servicio apostólico fecundo.