El padre César Garcés, Presidente de Fasta, entregó la Missio a miembros del Directorio. La ceremonia se realizó durante la santa misa celebrada ayer miércoles 12 en horas de la tarde en la capilla del Colegio Fasta Catherina de la ciudad de Buenos Aires.
«La misión, como toda misión en la Iglesia es participar de la única misión que es la misión de Cristo. Que es la misión que Dios Padre le da a su Hijo que es predicar la Salvación, la Redención» afirmó el padre César en una vibrante homilía.
La homilía comenzó afirmando que «Dios siempre cuenta con el hombre para ir entrelazando los hilos de la historia y entonces pasa y llama, pasa y llama, pasa y llama. Y llama para que vengas y penetres el misterio de amor y en ese misterio de amor Dios se revela y tú le conoces y de conocerlo lo amas: Señor me sedujiste y yo me dejé seducir y allí está la vocación. Allí encuentro el sentido profundo de lo que significa ser amado. Porque hay alguien que me ama a pesar de mí. A pesar de lo que soy y de lo que no soy, de lo que tengo y de lo que no tengo».

También dijo que «yo necesito la experiencia, la experiencia!! Me lo pueden contar mil veces que Dios es Amor. Pero si yo no experimento ese misterio de Amor y he vivido la experiencia de ese Amor no me siento el hijo, no me siento «el débil». Y solo por esa experiencia en la vocación me llama pero me llama para enviarme».
Para luego cerrar contundente «Ahí viene la Misión. Y la misión, toda misión en la Iglesia es participar de la única misión que es la misión de Cristo. que es la misión que Dios Padre le da a su hijo que es la salvación, la Redención».