Mikael más Gladius 50º Aniversario
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- 29 de diciembre de 2022
- Formación
Gladius ingresa en su año 39º y si sumamos a eso los 11 de su modelo Mikael estaríamos en el
50º aniversario de Mikael más Gladius.
Por Rafael Breide Obeid
La Propuesta de Gladius
Con motivo de nuestro 12º aniversario (1996) el Rvdo. P. Alfredo Sáenz como delegado del Sr.
Arzobispo Cardenal Antonio Quarracino se refirió a la labor de Gladius de este modo:
Al considerar la labor de Gladius conviene recordar la enseñanza de Santo Tomás, según el cual “es
propio del sabio exponer la Verdad y refutar el error”. Eso es lo que la revista se ha propuesto,
exponiendo los principios permanentes de la Fe y la Cultura Cristiana, a la vez que enfrentando la crisis
concreta por la que atraviesa nuestra época. Dicha crisis se manifiesta en un triple plano:
1 o ) El espiritual, advertible por la pérdida de la adoración, el espíritu de oración, de la sacralidad y el
enfriamiento de la Caridad. A ello la revista trata de responder con sus artículos sobre Sagrada Escritura,
Teología, Espiritualidad, Moral, entendida ésta como imitación de Cristo.
2 o ) El intelectual, como lo muestra la separación de la Ciencia y de la Fe, que ha desembocado en la
desintegración del Saber, a lo que responde Gladius con sus secciones de Filosofía, Política, Ciencia,
Historia, Derecho y Economía, Literatura, siempre a la luz integradora de la Teología. Semblanzas y
Arquetipos.
3 o ) El estético, según se advierte por el culto generalizado a la fealdad y la tendencia al nihilismo. Para
salir al paso de esta franja de lo decadente, Gladius ofrece sus artículos sobre la belleza considerada
como esplendor de la verdad, que se manifiesta en la Poesía, la Literatura y demás expresiones artísticas.
Música, iconografía y arte religioso en general.
La Tradición de la Iglesia y La Hermenéutica De La Continuidad
En la misma oportunidad Mons. Arana, Obispo Emérito de Concepción de Río Cuarto, nos leyó el
mensaje especial del Cardenal Quarracino, que se refiere al lugar que ocupó Gladius en la tradición de
las revistas católicas con estas palabras 1 :
Las personas de mi generación que hoy (1996) celebran el 12° aniversario de Gladius recordarán, sin
duda, el gran protagonismo que numerosos artistas e intelectuales católicos han tenido en la vida
cultural de la Argentina en la primera parte de este siglo. Estas personalidades nos han legado su visión,
su trabajo y una tradición al servicio de Cristo.
No sé si los jóvenes tienen noticia, como la gente de mi edad guarda memoria, de aquellas agudas e
ilustradas revistas que tanto bien nos han hecho en nuestra juventud. Pienso inmediatamente en Sol y
Luna, en Itinerarium, Diálogo, Ortodoxia, etc. Resultaron, en sus años, magníficos órganos de cultura y
evangelización, esto es, fueron testigos y apóstoles de Cristo. Los avatares del país y la economía no
permitieron, en la mayoría de los casos, su continuidad en el tiempo. Luego de mucho luchar, las
publicaciones fueron suspendidas o discontinuadas. Digo suspendidas porque siempre guardamos la
esperanza de que alguien tome la posta y las reflote.
Muchos de estos cuadernos o revistas tenían un marcado aprecio por lo artístico y nos regalaban
hermosas páginas que buscaban cultivar un humanismo católico. ¿Quién no recuerda los artículos
filosóficos, teológicos y literarios y el espacio dedicado a los poetas?
Gabriela Mistral dice, en el Decálogo del Artista: “No hay arte ateo. Aunque niegues a Dios con tus
palabras, lo afirmarás con tus obras.” Hoy parece que hay culturas muy atrevidas y artes muy reñidos con
el Cielo. Hay que preguntarse si realmente tratamos con artistas o, antes bien, con profesionales del
sacrilegio y la contracultura. Por suerte, Dios permite que siga habiendo revistas como Gladius, que nos
refrescan y orientan entre tanta confusión.
Porque Gladius es, a no dudarlo, digna heredera de aquella tradición de la cultura católica.
Hoy más que nunca se impone la necesaria tarea de evangelizar la cultura y son precisos católicos que
recojan el guante de este llamado. Quiero felicitar y bendecir esta gran obra y servicio a la Iglesia que es
Gladius, porque orienta a quien la lee y, con exactitud y elegancia, contribuye a la edificación de la
Ciudad de Dios. Congratulaciones, además, por la hazaña de durar 12 años. Que sigan muchos más.
Bendición Papal a Gladius
En la misma oportunidad (1996) recibió Gladius la Bendición Papal: “Me complazco en asegurarle que
el Santo Padre aprecia este gesto como expresión de filial cercanía y adhesión, a la vez que eleva sus
plegarias al Señor para que en sus publicaciones sepan afrontar los problemas y las exigencias de la
sociedad argentina a la luz de los valores cristianos y en sintonía con el Magisterio de la Iglesia. Con estos
sentimientos y en prenda de abundantes favores divinos, el Sumo Pontífice le imparte la implorada
Bendición Apostólica. Por la Secretaría de Estado, Monseñor Leonardo Sandri.”
La Continuidad con otras Publicaciones Católicas
Podríamos agregar a la lista de revistas de la tradición mencionadas por el Cardenal Quarracino otras
tres más, Jauja, dirigida por el P. Castellani, y Universitas, Revista de la UCA dirigida por Santiago de
Estrada, Decano de derecho y Ciencias Políticas, y Mikael. Meinvielle y Castellani escribieron en Mikael. Y
Santiago de Estrada publicó un trabajo valiosísimo sobre la Iglesia y la Constitución, en Gladius 2 .
Mikael
Mikael, revista del Seminario del Arzobispado de Paraná, que se editó desde 1973 a 1984. El
Arzobispo Monseñor Adolfo Servando Tortolo era Presidente del Episcopado argentino y el mejor orador
sagrado del país. Escribía en todos los números de Mikael el artículo principal sobre espiritualidad.
Dichos artículos fueron compilados en el libro Sed de Dios 3 . Según Caturelli: “El Padre Alfredo Sáenz S.J.
fue el jefe de estudios del Seminario de Paraná y al mismo tiempo, el alma de la revista Mikael que
alcanzó a publicar 33 números” 4 . En Mikael colaboraban destacados escritores de la Argentina y del
extranjero:
A) Sacerdotes como Héctor Aguer, José Brunet, Cayetano Bruno, Carlos Buela, Cardenal Caggiano,
Alberto Ezcurra, Guillermo Furlong, Alberto García Vieyra, el nuncio Pío Laghi, Julio Meinvielle, Leonardo
Castellani, Alfredo Sáenz (alma de la revista), José Torres Pardo, Néstor Sato, Monseñor Juan Laise, Ángel
Armelin.
B) Laicos argentinos como Ignacio B. Anzoátegui, Juan Pablo Ballesteros, Rubén Calderón Bouchet,
Denis Cardoso Biritos, Tomás Casares, Juan Casaubon, Alberto Caturelli, José M. Estrada, Enrique Díaz
Araujo, Jorge Ferro, Guillermo Gallardo, Juan Carlos Goyeneche, Arístides Garro, Guillermo Gueydan de
Rousell, Héctor Hernández, Héctor Llambías, Carlos Massini, Bernardino Montejano, Federico Mihura
Sebeer, Vicente Massot, Héctor Padrón, Héctor Piccinalli, Benito Raffo Magnasco, Patricio Randle,
Abelardo Pithod, Carlos Sacheri.
C) Escritores extranjeros de fama mundial como P. Armando Bandera, Mons. Luigi Carli, Card Luigi
Ciappi, Rafael Gambra Ciudad, Thomás Molnar, Joseph Pieper, Victorino Rodríguez O.P., Cardenal Joseph
Ratzinger, Cardenal Joseph Hoffner, Monseñor Rudolf Graber, P. Cándido Pozo, Michel F. Sciacca,
Cardenal José Slipyi, Juan Vallet de Goytisolo, Cardenal Giuseppe Siri, y finos poetas como Francisco Luis
Bernárdez, Juan Luis Gallardo, Rafael Jijena Sánchez y Juan Oscar Ponferrada.
La continuidad con Mikael
Al cumplirse los 20 años de Gladius 5 el P. Alfredo Sáenz consideró que ya había llegado la revista a la
mayoría de edad y explicó la continuidad intelectual de las dos revistas en el contexto de la guerra
cultural desencadenada por el gramscismo.
Gladius ha cumplido veinte años de existencia. Habiendo pasado las crisis propias de la niñez y
de la adolescencia, llega ahora a su edad madura. Fue en el último cuatrimestre de 1984 cuando apareció
el primer número. Su iniciación representó una verdadera quijotada, un acto de imaginación y de coraje.
Poco antes, la revista Mikael, por razones que trascendieron a sus redactores, debió dar término a la serie
que totalizó 33 volúmenes. Sabedores de dicha situación, un grupo de jóvenes, pletóricos de iniciativa y
de coraje, sin contar con otros medios que su decisión, resolvieron dar continuidad a aquella revista,
acogiendo en las páginas de la nueva publicación a quienes habían sido sus colaboradores, e incluso
ampliando su círculo. Sin dinero, pero llenos de confianza en Dios y de amor a la Patria.
Los gestores de la revista Gladius se propusieron tomar parte activa en la lucha de la que con tanta
inteligencia habló San Agustín cuando escribió su magnífico libro De Civitate Dei, donde considera todo el
curso de la historia, desde el Génesis al Apocalipsis, como el ámbito de un ininterrumpido conflicto entre
dos mentalidades, la de los que sostienen el primado de Dios, con la consiguiente subordinación del
hombre, su creatura, y la de los que se baten por el primado del hombre, hasta el endiosamiento,
formando filas en la ciudad soberbia, impregnada por el espíritu del mundo.
Este conflicto de índole teológica, el único que, más allá de las anécdotas cotidianas, nos permite
entender la trama oculta del devenir de la historia, ha tomado, sobre todo desde mediados del siglo
pasado, formas prevalentemente culturales. Quizás haya sido Antonio Gramsci, el agudo pensador que se
contó entre los fundadores del Partido Comunista italiano, quien mejor explícito los fines y la estrategia
de dicha revolución. Es preciso, decía, cambiar el modo de pensar de la gente. Antes de la toma del poder
político, será menester ocupar el ámbito de la cultura. Y ello a través, sobre todo, de los medios de
comunicación, cuyo carácter masivo permite esperar que la gente vaya renunciando poco a poco a su
manera de pensar trascendentalista, o a lo que queda de ella, agregamos nosotros, en este mundo
postcristiano, y haga suyo el espíritu de la inmanencia, es decir, aquella tesitura del hombre que se
encierra en la cueva del mundo, nueva caverna de Platón, como si el mundo fuese su hábitat definitivo,
receptáculo de todas sus esperanzas. Es curioso, pero en la actualidad el pensamiento y estrategia de
Gramsci, a nuestro juicio plenamente vigentes, se compadece con la aceptación de las normas del
capitalismo salvaje, eufemísticamente llamado neoliberal. En economía, el capitalismo; en cultura, el
gramscismo.
Pues bien, Gladius ha resuelto ocupar su puesto en dicho combate, que es primordialmente un
combate de ideas, un enfrentamiento de cosmovisiones, reductibles, en última instancia, a las que
proclama la Ciudad de Dios y la Ciudad del Mundo. Los que escriben en esta revista tratan de considerar
desde el punto de vista trascendental y teológico todos los otros temas: la filosofía, la historia, la
literatura, la ética, la economía…
Un papel destacado ocupa en la presente colección la parte destinada a las recensiones o comentarios
de obras recientemente aparecidas, que permiten a los presuntos lectores de los libros comentados un
juicio crítico más lúcido (más de 1500 recensiones). Si hojeamos los números hasta hoy aparecidos 6 -una
verdadera hazaña intelectual, cuando se piensa en la exigüidad de medios económicos y la extendida
alergia de nuestros compatriotas por la lectura advertimos la presencia de relevantes figuras del
catolicismo argentino, que a lo mejor no hubieran encontrado otros medios para expresarse, así como de
personalidades sobresalientes de lo que queda de cultura católica en Europa. Dios les dé ánimo a quienes
dirigen Gladius para que no cejen, a pesar de tantas dificultades y marginaciones, en su intento por
instaurar todas las cosas en Cristo.
En Gladius escribieron los dichos más: Alexander Solzhenitsin, Igor Chafarevich, Antonio y Mario
Caponnetto, Nicolás Kasansew, Carlos Biestro, Horacio Boló, Marcelo Breide Obeid, Ricardo Coll, Alonso
de Escobar, Hugo Esteva, Miguel Ángel Fuentes, Juan Luis Gallardo, Carlos Daniel Lasa, Cardenal López
Trujillo, Mons. Pedro Daniel Martínez Perea, P. Baltasar Pérez Ayos, Blas Piñar, Javier Ruffino, Mario
Sacchi, P. Ramiro Sáenz, Catrlos Sáenz, Octavio Sequeiros, P. Gabino Tabossi, Don Manuel Vargas de la
Torre, Juan y Francisco Rego, entre otros.
El Resumen de la labor realizada
En total son 650 autores que han escrito 3328 colaboraciones sin contar los libros de los que
informaremos en otra oportunidad. Ver el índice general integrado de Mikael más Gladius, al final de este
volumen.
Mi libro Imagen y Palabra 7 , conversaciones sobre la Guerra Cultural, ha sido considerado por Caturelli
como un panorama de toda la labor de Mikael más Gladius en estas últimas décadas. En ella se reúnen,
en una primera parte, La actualidad y lo permanente, son las editoriales de Gladius, que serían como una
crónica de los hechos ocurridos, y la reflexión sobre los mismos. La segunda parte, llamada Primeras
Letras, reúne mis primeros trabajos, la mayor parte en Mikael; pero la tercera parte, llamada Las
conversaciones sobre la Guerra Cultural, donde grandes escritores argentinos y extranjeros hablan del
combate espiritual de Gladius que ha emprendido en defensa de los valores de siempre frente a la
agresión contracultural. Así leímos a S.S. Benedicto XVI, Alfredo Sáenz, Alberto Caturelli, Mario
Caponnetto, Enrique Díaz Araujo, José María Pincemín, Mario Perotti, Pedro E. Baquero Lazcano,
Eduardo Forment, Miguel Ayuso, Blas Piñar, hablar de los grandes temas: Tiempo y Eternidad, Imagen y
Símbolo, Diálogo, Combate, Espíritu y Materia. Paz y Luz. Profundidad y Visión Profética. Logos y Mitos.
Misterios Inefables. Verdad. Comunicación y Testimonio.
Lo más destacado de esta tercera parte son las relaciones de S.S. Benedicto XVI, la recepción de su
doctrina, y su correspondencia con Gladius y con algunos de los principales colaboradores de ésta.
De la Guerra Cultural a la Guerra Social
Hoy al iniciar el año 39º de Gladius y el 50º de Gladius más Mikael la situación general ha cambiado
mucho. Sobre los escombros dejados por la guerra cultural, cuyo estratega fue Gramsci, se ha
desencadenado una guerra social que impregna en todos los planos, llamada también guerra total (por
impregnar todos los planos) o guerra global (por afectar a todo el mundo), o guerra molecular disipada
(por sus procedimientos y sus efectos, la disipación y dispersión final).
Ha concluido el mundo de la modernidad. Sus ídolos: la naturaleza, el progreso, la razón, la libertad,
los derechos individuales, la industria, el hedonismo, ya no están vigentes. Eso solo, señala un cambio de
época. Estamos en la era de la post verdad, y por tanto, en la negación del Bien, de la unidad y de la
belleza y la exaltación del mal, de la pluralidad como desintegración y de la fealdad.
A esta guerra social hemos dedicado varios trabajos que se encontrarán en Gladius y que se han
editado en libros 8 , el último de ellos la Guerra cultural y la destrucción del orden jurídico y moral de la
Argentina 9 (ver en Gladius 115 la presentación del Dr. Alberto Solanet).
La guerra cultural tiene por objeto la destrucción de la causa formal de la sociedad, es decir, de su
cultura y sobre todo de sus normas y su moral: la muerte de su alma. Fue el logro culminante de la
revolución cultural gramsciana actualizada por Toni Negri 10 que significó el máximo intento de
descristianización completa del país: la destrucción de toda ontología realista; la negación de la historia y
por tanto de la memoria y de la identidad del país, reducido a pura disponibilidad; la derrota definitiva de
la razón y del sentido común; la muerte de la caridad y del mero amor humano; la exhibición impúdica
del poder, satisfecho no solo de su ilegitimidad, que nunca podía tener un gobierno surgido de una
derrota nacional; sino de su propia ilegalidad.
En el aspecto sobrenatural esta guerra quiere borrar todo rastro de la imagen de Dios Uno y Trino en
el hombre y en la sociedad (ver sobre el tema de la revolución cultural en la Argentina las obras del P.
Aníbal Fosbery, Alfredo Sáenz, Abelardo Pithod, Enrique Díaz Araujo).
Año Jubilar
Durante todo el año jubilar continuará Gladius su reflexión frente al momento presente y las
responsabilidades que exige esta hora, lo que incluirá no loso la Revista-libro, sino también la Editorial
Gladius.
1 Antonio Cardenal Quarracino arzobispo de Buenos Aires Primado de la Argentina; Revista Gladius nº 37, diciembre 1996.
2 De Estrada, Santiago; La Iglesia y la Constitución, Gladius nro. 11, p. 35-55. Así mismo salió publicado en separatas por la
Corporación de Abogados Católicos.
3 TORTOLO, A., Sed de Dios, Buenos Aires, Claretiana,1977, 330 pp.
4 CATURELLI, A., Historia de la Filosofía Argentina, op. cit., p. 917.
5 Revista Gladius nº 58, año 2003, editorial: Veinte años de Gladius, P. Alfredo Sáenz.
6 Las revistas eran 58 en el 20º aniversario, año 2003. Hoy año 2022, son 115 volúmenes.
7 Breide Obeid, Rafael L.; Imagen y palabra. Conversaciones sobre la Guerra Cultural, ed. Gladius, Buenos Aires 2015, 376pp.
8 Breide Obeid, Rafael L.; Política y Sentido de la Historia, Ed. Gladius, Buenos Aires 20292, 674pp.; y ed. Letrada. México 2022
(en tres tomos); Políticamente Incorrecto, Estudio e Índices, Buenos Aires 2022, 96 pp.
9 Rafael Luis Breide Obeid la Globalización y la Destrucción del Orden Jurídico Y Moral En La Argentina, Ed. Gladius Buenos Aires
2022, 72pp.
10 Aníbal Fosbery, Las Vertientes de la Argentinidad,
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