Mendoza: «Pentecostés nos encontró de campamento»

Por Pablo Alvarez para hastadios-com-201978.hostingersite.com

La fiesta de Pentecostés ha tenido, este año, una significación muy singular para toda la Ciudad Miliciana.

El Jubileo de los 60 años bajo la consigna “nosotros no podemos callar lo que hemos visto y oído”, afirmación que solo tiene valor a partir de la conciencia plena de la acción del Espíritu Santo en nuestras vidas, sumado esto, a la partida de nuestro Fundador a la casa de Dios, que
nos reafirma en la esperanza y nos plenifica en la gratitud por su vida y por su obra, se concatenan para que hayamos querido hacer de esta fiesta de la fe, una vivencia íntima, comunitaria y profunda.

Por eso, no hallamos mejor manera que vivirlo que en un campamento. El campamento “Veni Creator” para la Agrupación Milicianos de Fasta Mendoza.

Y así fue que nuestros milicianos, más de 45 de ambos rucas, Curá y Llahué, partieron el viernes 3 de junio hacia la montaña mendocina, pintada con las primeras nieves del invierno, a vivir un especial Pentecostés bien miliciano.

Así, constituyeron un campamento de alto tono espiritual y reflexivo, que perforó hasta lo más profundo de las entrañas para abrir el corazón al amor del Espíritu que es capaz de transformarlo todo, de transformarnos todo.

Acompañados por nuestro capellán, el padre David Pérez Pazo y por la Catherina Ofelia Giunta, fueron transitando un camino de reflexión y comunión para culminar, en la madrugada del domingo 5, con una solemne y profunda Vigilia de Pentecostés, llena de signos, prologada por
una vibrante adoración al Santísimo y concluida con la oración individual pidiendo la efusión del Espíritu mientras el celebrante imponía sus manos, uno a uno, como signo apostólico.

Poco tiempo hace que regresaron, y ya se pueden ver los frutos del Espíritu obrando en sus almas. Sus ricos testimonios dan cuenta de todo esto.

Y el resto de la comunidad quiso también sumarse a la campaña, primero con la oración mediante el rezo de la novena al Espíritu Santo, a la que se sumó gran número de miembros de la comunidad, luego también, en la celebración del domingo de Pentecostés.

Así, la dimensión adulta de la Jurisdicción, con milicianos de la Mayor, padres del Colegio y padres de los Rucas, se reunieron el domingo 5 a las 11 de la mañana en el Templo de Nuestra Señora de la Merced para celebrar este día con un fuerte tono jubilar y para dar gracias por la
vida y la obra del Padre Fosbery al cumplirse el primer mes de su partida.

Unos en los cerros, otros en el templo, todos juntos, unidos por el Amor del Espíritu de Dios, nos hemos dispuesto a recibir los dones que el Señor quiera donarnos, con la certeza de que serán para dar Gloria a Dios y no callar lo que hemos visto y oído en estos 60 años de gracia
sobre gracia.