Teresita Terán: Acompañando el Espíritu Miliciano a través de la Música

En el bullicio de Buenos Aires, entre acordes y compromisos, Teresita Terán encuentra su hogar en la música y la evangelización cultural. A sus 29 años, esta talentosa miliciana de la Agrupación Mayor en Fasta Buenos Aires, no solo conquista escenarios con su arte, sino que también siembra semillas de fe a través de sus melodías.

Nacida en la vibrante capital argentina, Teresita descubrió su pasión por la música desde temprana edad. A los 4 años, tomó su primer violín, una elección que marcaría el inicio de un viaje musical que la llevaría a tocar las fibras más profundas del alma. Criada en un hogar donde el arte era valorado, sus padres, Gerardo y Diana, le infundieron el amor por la creatividad, allanando el camino para que Teresita abrazara su destino con fervor.

Sin embargo, no fue sino hasta los 14 años que Teresita tomó la decisión de seguir su llamado interior y sumergirse por completo en el mundo de la música. Con la guitarra entre manos y la voz como guía, comenzó su travesía hacia la maestría musical. A través del discernimiento y la dedicación, optó por hacer del arte no solo su pasión, sino su profesión. Con cuatro años de conservatorio y una formación especializada en producción musical en la Universidad Católica Argentina (UCA), Teresita encontró su vocación en la creación y producción musical.

Junto con sus compañeros Juli Volpe y Lucho Falcinelli, fundó Soplo Productora, un crisol de proyectos artísticos que buscan trascender fronteras y conectar corazones a través del arte.

Pero para Teresita, la música no es solo un medio de expresión, sino una herramienta de transformación social y espiritual. «El arte te desarrolla integralmente», comenta Teresita, reflejando sobre el poder sanador y unificador de la música.

En medio de su búsqueda de propósito, Teresita encontró un lugar especial en el proyecto musical católico «Bienaventurados». Estuvo de misión en Chaco en el año 2016, y providencialmente durante ese período comenzó a componer y a discernir el proyecto de «Bienaventurados». Aquí, como cantautora, encontró un espacio para fusionar su fe con su arte, llevando un mensaje de esperanza y amor a través de sus composiciones. «Hoy en día tenemos un equipo con muchos proyectos por delante para evangelizar la cultura», comparte Teresita con entusiasmo, destacando la importancia de utilizar el arte como un medio para difundir valores y principios universales.

Link a Instagram

Para Teresita Terán, la música no es solo una melodía, sino un puente que une corazones y trasciende barreras. Con cada acorde, ella teje una red de esperanza e inspiración, iluminando el camino hacia un mundo más compasivo y comprensivo. En sus notas, encontramos la promesa de un mañana más brillante, donde el arte y la fe se entrelazan para forjar un destino de amor y armonía.

Lic. Carola Foster, Editora de Arte y Cultura