La comunidad vivió una fiesta esta mañana de Kinshasa. También celebró la misa de Navidad. El fasteano Daniel Medina agradeció «al Papa Francisco, quien ha manifestado su apoyo directo a este proyecto y  a la Asociación Harambee, que en un tiempo récord nos facilitó los fondos necesarios para la construcción».  Amplia cobertura en los medios.

El Nuncio Apostólico en Kinshasa, monseñor Mitja Leskovar, visitó esta mañana el colegio Fasta Père Fosbery donde celebró la misa de Navidad junto a la comunidad y dejó inauguradas las obras que se llevaron adelante desde mediados de año en las instalaciones. También estuvieron presentes la embajadora de España en la República Democrática del Congo, así como amigos y benefactores de Fasta Kinshasa con una amplia cobertura de los principales medios de comunicación.

Monseñor Leskovar recorrió el Colegio y bendijo las tres  aulas nuevas, una nueva capilla, una portería y un  patio cubierto, obras más que necesarias para el desarrollo de la Institución. La comunidad estaba feliz de recibir a las vistas y le hicieron algunas demostraciones a través de su música.

La santa misa fue presidida por monseñor Leskovar y concelebrada por el padre Eduardo Lloveras, por el padre Reneidi Kayembe quien se encuentra en su Kinshasa natal,  por el padre Maurice Matata y por el padre Antuan. 

Posteriormente  se realizó una recepción a las visitas, donde el fasteano Daniel Medina ha expresado que «Dios es providente, pero se sirve de personas e instituciones que, de distintas maneras, forman parte de este proyecto. Aunque la lista de apoyos es interminable, quiero mencionar especialmente al Papa Francisco, quien ha manifestado su apoyo directo a este proyecto y siempre ha reconocido al Padre Fosbery como su amigo de juventud. También quiero agradecer a la Asociación Harambee, que en un tiempo récord nos facilitó los fondos necesarios para la construcción de estas nuevas instalaciones, así como a tantas personas que, de forma anónima, continúan apoyando este colegio de diversas maneras».

También reconoció «a todos los trabajadores de la construcción, quienes con gran profesionalismo han materializado estas instalaciones».

Finalmente ha expresado que «todo esto no sería posible sin el trabajo entregado de todo el personal del colegio, quienes han formado una verdadera comunidad de fe y servicio. Este compromiso ha posicionado a nuestro colegio como un referente en la comunidad, lo que ha generado una gran demanda de plazas. Para atender esta necesidad, fue indispensable la ampliación de las instalaciones, unas obras que aún continuarán».

La participación de Fasta en esta tarea de servicio evangelizador se realiza desde nuestro carisma, orientado principalmente a la juventud, la familia y la cultura. El mayor desafío hoy está en la inculturación de dicho carisma en este país que nos ha recibido, apoyado y sostenido.

Nuestra apuesta concreta es por la educación católica, fundamentada en valores y virtudes como el eje principal de la formación de estos niños. Con ello, buscamos formar hombres y mujeres virtuosos que contribuyan al bien común de esta sociedad.

JUNTOS POR ÁFRICA

Harambee es un proyecto internacional, iniciado en 2002 con motivo de la Canonización de San Josemaría Escrivá. Harambee promueve el desarrollo de África subsahariana con el apoyo a proyectos de promoción de la mujer, educativos o de salud materno-infantil.

Difunde en el resto del mundo una mirada positiva sobre los africanos para hacer realidad el sueño de cooperación, igualdad y respeto, admira los  valores de la cultura africana, como la alegría, importancia del vínculo familiar o la debida consideración a los mayores. • Cree en su capacidad para desarrollar plenamente a sus países, educar a las nuevas generaciones y promover la igualdad de la mujer. • Considera que la educación, la formación personal y profesional es la vía más segura para alcanzar un futuro mejor.